
Porqué he escrito un libro de Maternidad?
«La mejor mamá del mundo eres tú»Maternidad Poética Ilustrada.
Este es el libro de mi historia de amor. Con mis fotografías, mis poemas y mis reflexiones. Es un cuento por amor al arte.
Cuando me quedé embarazada y comencé a buscar información, me quedé muy sorprendida. La mayoría de los libros eran muy técnicos, casi todos escritos por hombres, y con una visión muy parcial de todo lo relacionado con la maternidad.
Descubrí en los foros de maternidad las disputas entre las madres que practicaban un estilo de crianza u otro. Una disputa que es bastante fiera por cierto y que incluye juicios de valor.
Me pareció que todo el enfoque se hacía de manera exclusivamente mental y emocional, y que se obviaba la parte instintiva y espiritual del hecho de traer niños al mundo.
Pienso que hay mucha diferencia en cómo nuestras abuelas o incluso las madres de mi generación hacían las cosas, y como somos nosotras. Mujeres que hemos tenido muchos más derechos por suerte y que hemos tenido la posibilidad de elegir, y que ahora estamos bastante confundidas.
Creo que con respecto al tema de la maternidad hay actualmente mucha controversia. Y no hablo de esa minoría que está informada, que busca opciones, y que encuentra respuestas y obra coherentemente, hablo de una sociedad cada vez más superficial y egoísta, donde lo queremos todo y lo queremos ya, donde al final todo es o renuncia y sacrificio o culpabilidad, y donde además los parámetros que usamos son exclusivamente materialistas en muchos aspectos.
Cada vez veo más niños malcriados con muchas cosas materiales, madres estresadas, padres que no se involucran o que si quieren hacerlo no saben cómo. Competición, alimentación poco natural, reglas confusas para la educación, niños con iPad, muchas prisas y poco sentido común. Madres que quieren escuchar a todos y que al final tiran como pueden para adelante, sin disfrutar plenamente de esta etapa tan bella y especial.
Por eso busqué mi propio camino. Una Maternidad Poética, que me haga ser consciente practicando la lógica, el instinto y el respeto para mi hijo y para mí. Armonizando cada una de mis partes, para no renunciar a nada y a la vez ser eficiente, amorosa y no sentir culpa cuando necesito ocuparme de mí misma.
Para que la maternidad no sea renuncia, ni lucha, ni sacrificio ha de ser Amor sin apego, sin condicionantes, Libre y Sincero, Creativo y auténtico, Natural y sin artificios.
Para que no te cambie la vida, sino que sea vivir la vida más intensamente. Para darle a nuestros hijos la posibilidad de crecer auténticos y equilibrados, sin volvernos locas en el intento.
Pero entiendo que la única manera de concienciar o de compartir algo que uno ha descubierto y que para uno es bueno, es transmitiéndolo en libertad y con amor. Sin condenar ni juzgar ni sentenciando a nadie. Entendiendo siempre que cada uno ha de encontrar su propio camino. Por eso en este libro encontrarás únicamente mi experiencia, y además contado en forma de cuento, con poemas y anécdotas, con reflexiones profundas e imágenes evocadoras. No quiero convencerte de nada, solo contarte mi historia por si puede servirte de algo, o entretenerte y hacerte pasar un buen rato.
Por ejemplo para mí, la lactancia materna es la única opción, pero si quiero compartir con alguien mi opinión, y esperar que tú la consideres, no puedo hacerlo sentenciando ni juzgando ni forzando, sino contándote cómo lo veo yo desde el amor y el respeto.
He llegado a oír a mamás decir que el tema de la alimentación no tiene nada que ver con el amor. He visto como mujeres critican a otras por las decisiones que han tomado con respeto a la crianza de sus hijos. Veo a mi alrededor mucha crispación y mucho estrés de mamás que se ven superadas y que están exhaustas y cansadas y abatidas, y que a la vez aman a sus hijos por encima de todas las cosas y dan lo mejor que tienen. Y aún así las juzga la sociedad, las demás madres y ellas mismas.
Solo vengo a decirte que la mejor mamá del mundo para tu hijo eres tú misma cuando estás en plenitud.
Vengo a contarte que los niños se adaptan a todo, que no necesitan tantas cosas, que no tienes que preocuparte por ganar ninguna carrera. Que ellos ya nacen perfectos y que solo hay que dejarlos ser con naturalidad.
Vengo a contarte que tu cuerpo es sabio y que sigas tu intuición y solo escuches a tu corazón. Y eso parece obvio pero créeme. No lo veo frecuentemente a mi alrededor. Vengo a decirte que tu hijo no es tuyo, que no está aquí para cumplir tus expectativas, ni para hacerte feliz. Y eso querida amiga, no todo el mundo está dispuesto aceptarlo.
Otra manera de vivir es posible. Y otra manera de traer niños al mundo también.
No tengo respuestas. Solo mi experiencia y mi visión de las cosas. Estoy en el camino. Evolucionando y aprendiendo.
No giro alrededor de mi hijo. Mi hijo no es el centro de mi universo, sino un planeta con luz propia, que mientras crece, se forma y encuentra su propio centro, forma parte de mi galaxia.
La mejor mamá del mundo para Hermes soy yo cuando estoy en plenitud.
La mejor mamá del mundo, para tu hijo eres tú.